Lunes 29 de Abril de 2019

Curso en torno a Leonardo da Vinci abordará la vida y obras más representativas del artista italiano

Con motivo del quinto centenario de la muerte de Leonardo Da Vinci, la Dirección de Extensión Cultural invita a descubrir cuáles fueron las influencias artísticas y la innovación radical en los campos del arte y las ciencias naturales que legó el maestro italiano a la cultura occidental.

A través de sus dibujos, Leonardo da Vinci (1452 – 1519) “buscaba comprender intelectualmente las leyes de la naturaleza para poder recrearlas en nuevas invenciones”, señala Sandra Accatino, profesora de este curso.

Sandra Accatino, Doctora en Filosofía con mención en Estética y Teoría del Arte por la Universidad de Chile, será la encargada de dictar el curso “Leonardo da Vinci, 500 años”, organizado por la Dirección de Extensión Cultural, que consta de tres clases y que parte este jueves 2 de mayo, mismo día en que en el mundo recordará al hombre instruido en casi todos los ámbitos del conocimiento humano, como se le reconoce. 

Arte, ciencia, botánica y anatomía forman parte del universo del sabio renacentista, pero poco se conoce su faceta de ingeniero militar, urbanista y músico, perfil que busca rescatar Sandra Accatino, experta en el Renacimiento y el Barroco de Italia quien, hace unas semanas, participó junto al científico italiano David Bigoni en el VI Festival de ciencias de Puerto de Ideas Antofagasta con la charla “De Leonardo da Vinci a la robótica”. 

¿Cómo fue la experiencia en Puerto de Ideas y la recepción de la audiencia en torno a la charla de Leonardo da Vinci?
Fue una oportunidad extraordinaria para acercarse a conocimientos complejos, vinculados a disciplinas científicas y explicados a un público amplio y curioso. Ver a más de 18.000 personas moviéndose por una ciudad para asistir a distintas conferencias, obras de teatro, conversaciones y experimentos fue una experiencia increíble y el efecto que tienen sobre la difusión científica es muy alto.  
La presentación que realizamos de Leonardo fue un gran acierto, porque solemos relacionarlo exclusivamente con pinturas como La Gioconda o La última cena, pero su descripción y análisis de la naturaleza es muy poco conocida. Recordemos que él mismo se definía antes como una suerte de ingeniero que como un pintor.

Sandra Accatino es
Doctora en Filosofía, con mención en Estética y Teoría del Arte, por la Universidad de Chile.

¿Cuáles son las grandes cuestiones que planteó Leonardo da Vinci, para seguir -500 años después- reinterpretando su legado?
Como gran parte de sus contemporáneos, Leonardo suponía que existía una estrecha relación entre todos los elementos que componen la naturaleza. Uno de sus aspectos más característicos es que él fue capaz de expresar las analogías que unen el microcosmos y el macrocosmos, el hombre y el resto de la naturaleza, a través de un pensamiento visual que se encarnó sobre todo en sus dibujos.

¿Qué podemos encontrar en estos dibujos y manuscritos?
A través de ellos, buscaba comprender intelectualmente las leyes de la naturaleza para poder recrearlas en nuevas invenciones. Esto también se ve, por ejemplo, reflejado en la agudeza y sensibilidad de sus pinturas: la forma en que caen los pliegues del vestido de la Gioconda, la transparencia de las aguas de la Virgen de las Rocas, la conformación geológica que se descubre en las montañas pintadas en los paisajes de sus retratos y cuadros devocionales.

La figura de “genio” de Leonardo da Vinci se ha difundido por siglos, ¿qué mitos aún se profesan sobre su vida y obra?
El mito del genio universal es probablemente la mayor fantasía que tenemos respecto a Leonardo. Este se sustenta, en parte, en la alta estima que tenían sus propios contemporáneos de sus vastos conocimientos, de su talento creativo en muy diversas áreas, su curiosidad y capacidad analítica, la inteligencia y agudeza de su conversación.

“Leonardo da Vinci, 500 años” comienza el jueves 2 de mayo a las 19:00 horas en la UANDES.