Una innovadora iniciativa científica está cambiando la forma de investigar las complicaciones derivadas de los tratamientos contra el cáncer. Se trata del proyecto “Co-creando conocimiento: La experiencia de pacientes en el desarrollo de una línea de investigación para el manejo de las complicaciones orales de la terapia oncológica”, que busca integrar activamente a los pacientes en todas las etapas del proceso investigativo.
La propuesta, liderada por Wilfredo González, académico de la Facultad de Odontología, se desarrolla en varias fases y tiene como punto de partida la identificación de las necesidades, experiencias y perspectivas de los pacientes oncológicos frente a las toxicidades orales que pueden surgir durante la terapia. Posteriormente, el equipo avanzará hacia un proceso de co-creación, donde pacientes y cuidadores trabajarán junto a los profesionales para definir las líneas de investigación más relevantes y con mayor potencial de impacto.
“El proyecto contempla además una fase de experimentación en entornos reales y una etapa final de evaluación, con el objetivo de asegurar resultados concretos, transferibles y con impacto directo en la calidad de vida de quienes enfrentan el cáncer”, comenta Wilfredo.
Un enfoque centrado en quienes viven la enfermedad
La investigación se sustenta en tres pilares clave:
a) la participación activa de los pacientes,
b) un enfoque plenamente centrado en sus necesidades, y
c) una mirada integral que aborde no solo los desafíos físicos, sino también los aspectos emocionales y sociales asociados a las toxicidades orales.
El equipo de trabajo estará conformado por oncólogos, psicólogas, enfermeras y médicos orales, quienes colaborarán estrechamente con pacientes y cuidadores invitados a talleres, grupos de discusión y actividades participativas.
Impacto social y sanitario
La relevancia del proyecto radica en su contribución directa a mejorar la calidad de vida de los pacientes oncológicos, al favorecer una reducción de complicaciones, mejores resultados terapéuticos y mayor satisfacción con la atención recibida. A nivel social, se espera un impacto positivo reflejado en menores costos para el sistema de salud y en una mayor conciencia pública sobre los efectos orales de la terapia oncológica.
“Esta iniciativa abre camino a un modelo de investigación más humano, colaborativo y orientado a las necesidades reales de quienes viven el cáncer, posicionando la participación de los pacientes como un elemento central en la construcción de conocimiento y soluciones clínicas”, concluye el investigador de la Facultad de Odontología.