Jueves 30 de Abril de 2020

“Al estudiar juntos esta carrera nos apoyamos y motivamos para hacerlo lo mejor posible”

José Ignacio Díaz y Bernardita Domínguez (ADS ‘97), casados hace 22 años, estudian el Programa de Pedagogía Media en Religión Católica en la UANDES y nos cuentan sus motivaciones para emprender este proyecto como matrimonio.

José Ignacio Díaz (abogado de la Pontificia Universidad Católica de Chile) y Bernardita Domínguez (administradora de servicios de la Universidad de los Andes) están casados hace 22 años, tienen 9 hijos (entre 20 y 6 años) y están estudiando juntos el Programa de Pedagogía Media en Religión Católica en la UANDES.

Bernardita hace años que quería hacer clases de religión y no tenía mucho tiempo con las responsabilidades de la casa. José Ignacio trabaja en una fundación educacional donde las clases de esta asignatura son una de las materias más importantes y estaban buscando profesores de religión. “Lo vimos como una actividad que podíamos hacer juntos como matrimonio y hasta ahora ha sido una muy buena experiencia. El trabajo, tanto de la casa como fuera de ella, es muy intenso y al estudiar esta carrera juntos nos vamos apoyando y motivando para hacerla lo mejor que podamos. Nuestros niños están felices y nos han apoyado mucho en este tiempo”, explica Bernardita.

“Analizamos las distintas opciones para hacer la carrera a través de un post título y llegamos a la conclusión que la alternativa de la UANDES era por lejos la mejor. Esta casa de estudios tiene excelentes profesores, un muy buen currículo y un alto nivel de exigencia”, comenta José Ignacio. “Hacer clases en un colegio siempre tiene un componente vocacional, lo que  es aún más importante si la asignatura que se enseña es religión. Es un gran desafío y estamos contentos de poder estudiar en la UANDES, donde hemos visto en estos meses que existe una preocupación de formar muy bien a los futuros profesores, preparándolos para esta importantísima tarea”, detalla Bernardita.

Con el cambio de sistema de clases a distancia debido a la contingencia provocada por el COVID-19, José Ignacio cuenta que el sistema online ha funcionado muy bien. “Todos las materias han sido enseñadas de la mejor forma, pero las clases on line no reemplazan las presenciales en cuanto al conocimiento de los compañeros de clases y al aprovechar mejor el contacto personal de los profesores”, concluye.