Patricio Campos, destacado guionista de programas, series y películas de humor, contó la historia de este género televisivo en nuestro país y cómo han variado los recursos para hacer reír a la gente a lo largo de los años.
Los inicios de la televisión
en Chile datan del año 1959, cuando Canal 13
realizó las primeras transmisiones y
desde ahí, son varios los hitos y fenómenos que han marcado la historia de la T.V en nuestro país. El
inicio de Sábado Gigante
en 1960, la transmisión del Mundial
de 1962, el programa de actualidad
Chile TV, así como también
la creación de Televisión Nacional, por
mencionar algunos. Sin embargo, hay un recurso
exitoso en televisión que comenzó
hace muchos años y que hace que los espectadores se sientan identificados: el humor.
El humor, en ese
tiempo, se veía a través del teatro de
revistas en distintos lugares del país, pero con la caída del gobierno de Salvador Allende, “los artistas quedaron
botados y decidimos trasladar el
espectáculo nocturno a la televisión. Fue así como todas esas trabas que
tenía la industria, todas esas cosas que no se podían mostrar, las mostrábamos,
pero desde una vereda distinta, desde el humor”,
cuenta Patricio Campos, guionista y una de las primeras personas en el país en
incursionar en este género televisivo.
El primer sketch humorístico en la televisión
apareció el año 1983 en el programa Sábado Gigante con
“Los Valverde”, una
familia que contaba con actores funcionales que abordaban temas que no se conversaban
mucho. “Muchos vivíamos la realidad de
la clase media del país y queríamos generar un estímulo a conversar
aquellos temas tabú. Los Valverde reflejaban
eso, y por lo mismo, la gente se sentía
identificada ya que era su propia realidad”, afirma.
Fue así como desde “Los Valverde”, se
empiezan a incorporar distintas familias
en los programas chilenos. “La gente
se identificaba con ellos, eran sus
propias historias, por eso teníamos éxito”, afirma Campos. “Los Eguiguren”, “Pobre Papá”, “Departamento de solteros”
y luego “Los Venegas”
son algunas de las familias más conocidas en la programación nacional.
“Los actores no vieron con buenos ojos entrar a la TV, ya que el rol del humor no era tan bien valorado. Pero muchos sí pudieron ver una verdadera alternativa para ejercer su profesión y consolidar su carrera, un claro ejemplo fue el de Pato Torres, quien ahí ”, dijo Campos al finalizar el Acta Diurna.